Viajes a Malta
Viajar a Malta es descubrir un pequeño archipiélago lleno de encanto con más de 7.000 años de historia con un riquísimo patrimonio artístico. Su estratégica ubicación entre Europa, Norte de África y Próximo Oriente ha favorecido que numerosos pueblos hayan invadido estas pequeñas islas.
Desde los primeros asentamientos prehistóricos, allá por el milenio V a.C. hasta su entrada en la Unión Europea en el año 2004. Malta ha soportado la presencia de diferentes pueblos, desde los fenicios hasta el Imperio Británico, y todos ellos dejaron testimonio de su presencia.
Malta es un importante destino turístico por su sol, sus playas, sus agrestes acantilados y grutas, pero Malta es mucho más. En ella sus primeros habitantes dejaron huellas megalíticas de su presencia en numerosos templos, obras maestras de la arquitectura megalítica, declaradas por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad. Malta posee un riquísimo patrimonio paleocristiano, impresionantes catacumbas (cementerios subterráneos) talladas en roca viva, construidas a lo largo de los períodos romano y bizantino.
Viajar a Malta es descubrir el legado de la Corona de Aragón y de España (del s. XIII hasta principios del XVI) a través de palacios, iglesias y construcciones defensivas. Es descubrir un arte propio Renacentista y Barroco estrechamente ligado a la Orden de Malta que durante dos siglos y medio dirigió su destino y fue capaz de rechazar la invasión del Imperio Turco de Solimán el Magnífico.