Viajes a Chipre
Viajar a Chipre es descubrir la maravillosa “Isla del Cobre” de la Antigüedad, codiciada y colonizada desde los aqueos de Micenas hasta los británicos. Viajar a Chipre supone descubrir sus mil y un tesoros: asentamientos prehistóricos, vestigios de ciudades estado de la Edad del Bronce, ciudades greco-romanas, basílicas paleocristianas, monasterios e iglesias bizantinas decoradas con maravillosas pinturas murales, castillos cruzados, iglesias góticas y fortalezas venecianas.
Chipre, encrucijada entre Oriente y Occidente, ha sido esencial para el control del Mediterráneo oriental. Conquistada por Ricardo I “Corazón de León”, al comienzo de la 3ª Cruzada, se coronó rey de Chipre y casó en Limassol con la infanta Berenguela de Navarra, convirtiéndose la isla en retaguardia de los cruzados y baluarte de la Cristiandad hasta que finalmente cayó en poder del Imperio Otomano.
Sus bellísimos paisajes: abruptos acantilados, infinitas playas de fina arena y cristalinas aguas turquesa, frondosos bosques de coníferas y valles de cedros no pasaron inadvertidos para los dioses griegos. Afrodita, diosa del amor y la belleza, eligió un lugar de su costa meridional (Petra tou Romiou) para nacer del mar, dentro de una concha, entre la espuma de las olas.
Viajes a Chipre con Salidas Regulares
Viajes de Autor a Chipre
Nuestros Hoteles
HOTELES EN LARNACA
Dhekelia Road, CY6306 Larnaca, (Cyprus)
Tlf.: +357 24 645 444
Web: Golden Bay Hotel
El hotel está situado enfrente del mar, en el centro de la bahía de Larnaca. Sus 193 habitaciones disponen de balcón privado con vistas al mar, completas o parciales y están perfectamente equipadas. Las suites ofrecen todo el confort y cuentan con terraza privada y jacuzzi. Los restaurantes y bares del hotel ponen a su disposición una amplia oferta de comida y bebidas. El complejo dispone de varias piscinas, tanto cubiertas como exteriores, un gimnasio y un centro de estética con sauna, baño turco, salón de belleza y servicio de masajes.
Dhekelia Road, 6305 Larnaca, (Cyprus)
Tlf.: +357 24 647 444
Web: Lordos Beach Hotel
El hotel se encuentra en una playa privada de la bahía de Larnaca. Sus 175 habitaciones disponen de balcón y vistas laterales al mar Mediterráneo. Todas las habitaciones cuentan con aire acondicionado, minibar y TV vía satélite. Sus suites disponen de un jardín privado y una terraza de madera que da paso a la zona de jacuzzi. El hotel cuenta con varias piscinas al aire libre y ofrece la posibilidad de practicar varios deportes acuáticos como buceo, windsurf y esquí acuático. El hotel también dispone de una piscina cubierta, una pista de tenis y un club infantil. Los 2 restaurantes del hotel ofrecen cocina chipriota, mediterránea e internacional.
6, Athens Avenue, CY 6023 Larnaca, (Cyprus)
Tlf.: +357 24 653 341
Web: Sun Hall Hotel
El hotel se encuentra en el centro de la ciudad de Larnaca, frente a la zona de tiendas. Disfrutando de vistas panorámicas al Mar Mediterráneo y al famoso paseo marítimo de Phinikoudes. Sus 114 habitaciones estan completamente equipadas. El restaurante Kition, perteneciente al hotel, ofrece una excelente carta de comida local e internacional.
Dhekelia Road, P.O.Box 40801 CY- 6307 Larnaca, (Cyprus)
Tlf.: +357 24 646 022
Web: CROWN RESORTS HENIPA
El hotel se encuentra situado en la carretera de Larnaca a Dhekelia, a 6 Km. de Larnaca y a 150 m. de la playa. Dispone de 164 habitaciones, entre las que se cuentan 6 suites y 40 bungalows. Todas ellas estan completamente equipadas. Sus restaurantes disponen de carta local e internacional, así mismo cuenta con distintos bares y zona de tiendas. Cuenta con piscinas cubiertas, al aire libre, piscinas para niños y dispone de instalaciones para deportes acuaticos, gimnasio, tenis...
HOTELES EN LIMASSOL
Georgiou Neophytou & D. Nicolaou Street, 4006 Limassol (Cyprus)
Tlf.: +357 25 590 000
Web: Ajax Hotel
El Ajax Hotel está situado junto al museo arqueológico, en el centro de Limassol. Nos sorprendde su elegante decoración y sus cuidadas instalaciones. Sus 176 habitaciones y suites son amplias, con aire acondicionado y TV vía satélite y balcón con vistas al jardín del hotel o a la ciudad.
Las instalaciones del hotel incluyen zona de spa con sauna y jacuzzi, además de piscina cubierta. Los huéspedes también pueden hacer uso de su gimnasio, la pista de tenis del hotel.... Cuenta con una buena cocina local e internacional y ofrece Wi-Fi en las zonas comunes.
28th October Avenue, 3507 Limassol (Cyprus)
Tlf.: +357 25 851 515
Restaurado en 2011 se encuentra cercano al casco antiguo y en mitad del paseo marítimo. Dispone de dos piscinas, una zona de playa privada y ofrece habitaciones con balcón con vistas al mar. Las 144 habitaciones y suites del Crowne Plaza cuentan con aire acondicionado y mobiliario moderno. Están equipadas con televisión vía satélite, cafetera y minibar.
Su restaurante ofrece una amplia variedad de platos chipriotas y ofrece vistas panorámicas del puerto y de la bahía de Limassol. Los huéspedes pueden disfrutar de su gimnasio, jugar al tenis, o de un relajante masaje. Otras instalaciones del hotel incluyen una sauna y una sala de vapor.
HOTELES EN NICOSIA
Griva Dhigeni Avenue, 1507 Nicosia (Cyprus)
Tlf.: +357 22 695 111
Web: Hilton Park Nicosia
Rodeado de jardines y situado a 10 minutos del centro histórico, el Hilton Park Nicosia pone a nuestra disposición sus 194 habitaciones totalmente equipadas.
Dispone de una excelente cocina local e internacional y cuenta con un agradable bar en forma de barco desde el que podemos observar alguna de las instalciones del hotel, como su refrescante piscina al aire libre en forma de lago. Además el hotel cuenta con pista de tenis, sauna, gimnasio, solárium, spa, masajista, jacuzzi... e internet de pago con conexión de cable y wi-fi disponible en todo el hotel.
8 Florinis Street, 1065 Nicosia (Cyprus)
Tlf.: +357 22 844 000
Web: Cleopatra Hotel
Situado en el corazón de Nicosia, los lugares de interés histórico están a un corto paseo del hotel. El Cleopatra Hotel dispone de unas excelentes instalaciones de fitness y sus restaurantes ponen a nuestra disposición una carta extensa con gran variedad de platos.
Sus clientes tienen a su disposición un gimnasio, piscina, sauna y un servicio de masaje profesional. Dispone de internet wi-fi, de pago, en las habitaciones.
HOTELES EN PAPHOS
Posidonos Avenue, CY-8102 Paphos (Cyprus)
Tlf.: +357 26 965 000
Web: Alexander The Great Beach Hotel
Este elegante y lujoso hotel se encuentra en la playa de Paphos. Cuenta con tres restaurantes, 2 piscinas, playa privada, pista de tenis, aparcamiento privado, etc. Sus 202 habitaciones y suites, elegantemente decoradas, disponen de aire acondicionado, cafetera y minibar. Algunas poseen balcones amueblados con vistas al mar, al castillo medieval y al antiguo puerto de pescadores de Paphos.
Sus huéspedes pueden optar entre disfrutar de un baño en su playa privada, sus piscinas, recibir un masaje relajante o utilizar el resto de las instalaciones: pista de tenis, gimnasio, sala de juegos con billar... El parque arqueológico de Paphos y el centro de la ciudad se encuentran a cerca y bien comunicados.
Datos del País
CIUDADES
FAMAGUSTA
Famagusta, ciudad portuaria situada al este de la isla, es una de las más hermosas de Chipre, conocida en el pasado como “la ciudad de las 365 iglesias”. Su casco histórico medieval encerrado en inexpugnables murallas venecianas (las más importantes de la antigua Republica de San Marcos de Venecia” en Oriente, esconde verdaderas joyas de la arquitectura gótica y renacentista.
Ésta ciudad fundada por los Ptolomeos en el siglo III a. C. comenzando como un pequeño pueblo de pescadores. Durante la ocupación egipcia de la isla, prosperó gracias a la decadencia gradual de la vecina Salamina a causa del encenagamiento de su bahía. En la Antigüedad fue conocida con el nombre de “Arsinoe”, siendo mencionada por el geógrafo griego Estrabón.
Famagusta tuvo su momento de esplendor en la Edad Media. A partir de 1192, momento en que la dinastía de los Lusignan comenzó a reinar en Chipre, la ciudad dotada de un magnífico puerto natural se convirtió en sede de su gobierno y su población creció a medida que crecía la importancia de su puerto en el Mediterráneo oriental.
Tras la caída de la ciudad cristiana, San Juan de Acre, capital del Reino Latino en Tierra Santa, en manos de los musulmanes en 1291, Famagusta recibió un importante contingente de refugiados, muchos de ellos mercaderes.
Bajo el dominio franco (siglos XIII y XIV) se convirtió en una de las ciudades más ricas y famosas del mundo. Orgullosa de albergar más de 300 iglesias (muchas de las cuales hoy se encuentran en ruinas y otras transformadas en mezquitas). En 1371 Santa Brígida de Suecia predicó en la Catedral de San Nicolás (espléndido ejemplo de gótico francés), de camino a Tierra Santa.
En 1372 la ciudad fue tomada por la República de Génova y en 1489 pasó a depender de la Serenísima República de Venecia, momento en que la a actividad comercial comenzó a disminuir.
Durante el asedio turco de 1570-1571 sufrió diversos daños a causa del bombardeo. Por aquel entonces la ciudad estaba habitada sobre todo por griegos ortodoxos, oprimidos por los impuestos y dispuestos a dejarse conquistar por los nuevos conquistadores.
En 1571 Famagusta cayó ante los turcos tras resistir un largo asedio. El cambio de dueños tuvo un efecto importante en el entorno arquitectónico y físico de la ciudad. Trescientos años de dominio otomano dejaron una clara huella en la ciudad.
La catedral se convirtió en mezquita, se construyeron escuelas teológicas, baños y fuentes, e incluso su estructura urbana adquirió el estilo oriental. El puerto entró en una fase de declive.
En el periodo de administración británica el puerto recobró importancia sobre todo tras la construcción del ferrocarril local. La ampliación de la ciudad fuera de las murallas, ya iniciada en época otomana, se aceleró. Al final del periodo británico la influencia de la arquitectura británica se hizo especialmente evidente. La ciudad sirvió también como campo de concentración para judíos supervivientes del Holocausto que pretendían instalarse en Palestina.
Desde la independencia alcanzada en 1960 hasta la invasión turca de Chipre en 1974, Famagusta prosperó tanto cultural como económicamente. Cuando el ejército turco ocupó la ciudad, está ya había sido completamente evacuada por la población greco-chipriota. La población de la ciudad disminuyó drásticamente.
KIRENIA (Girne)
En la costa norte de la isla, en un emplazamiento privilegiado, bañada por las aguas del Mar Mediterráneo y al amparo de la Cordillera de Pentadáktylos (impresionantes montañas cargadas de leyendas) se halla ciudad portuaria de Kyrenia, “la perla del Mediterráneo”, surgida en torno a su pequeño y bonito puerto veneciano y al amparo de su imponente fortaleza.
Kyrenia, hoy una destacada localidad turística, es una auténtica joya por su bellísimo puerto veneciano cerrado por una estrecha lengua de tierra y rodeado por un paseo marítimo en el que aún se conservan los grandes amarraderos medievales de piedra que dan idea de la importancia del puerto en el pasado, y su impresionante castillo, que francos y venecianos convirtieron en una magnífica fortaleza, que hoy alberga el interesante Museo del Naufragio.
Las evidencias arqueológicas establecen que la zona de Kyrenia sirvió de refugio a emigrantes griegos que a causa de las invasiones indoeuropeas de finales del II milenio a.C. abandonaron Grecia para instalarse en las islas del Egeo. De hecho, la referencia más temprana a la ciudad de Kyrenia se encuentra en textos egipcios del período de Ramsés III (1125-1100 a.C.). No obstante, hay indicios de que en áreas próximas a la actual Kyrenia hubo asentamientos neolíticos (5800-3000 a.C.) y posteriormente micénicos (hacia 1340 a.C.).
Desde sus primeros tiempos y dada su proximidad a las costas de Asia Menor, Kyrenia se benefició del comercio marítimo. Durante la lucha entre Ptolomeo y Antígono que siguió a la muerte de Alejandro Magno, en el 323 a.C., Kyrenia fue vasalla de la ciudad-estado de Lapithos, aliada del segundo. Por ello, Ptolomeo le infligió un severo castigo al conquistarla, aunque no por ello acabara aquí su actividad comercial. De hecho, Kyrenia aparece citada en el siglo II a.C. como una de las seis ciudades chipriotas beneficiadas por el oráculo de Delfos. Con los romanos, Kyrenia siguió siendo una populosa y próspera ciudad. A ellos se les atribuye la construcción de una fortaleza en un lugar estratégico, reutilizado durante siglos por todas las potencias que llegaron a la isla.
Los emperadores bizantinos remodelaron el castillo romano de Kyrenia, cuya importancia creció cuando los árabes destruyeron la vecina población de Lambousa en el año 806. En el siglo X se levantó en él una iglesia dedicada a San Jorge, empleada como capilla para su guarnición. En el siglo XII su castillo era considerado el refugio más seguro de la isla, y allí se cree que Isaac Comneno, el último gobernador bizantino de Chipre, envió a su familia y sus tesoros antes de enfrentarse a Ricardo “Corazón de León” en 1191. La victoria del rey inglés le convirtió en señor de la isla.
Bajo el dominio franco, las villas del distrito de Kyrenia se transformaron en territorios feudales, y la ciudad paso a ser, nuevamente, el centro administrativo y comercial de la zona. Su castillo fue ampliado entre 1208 y 1211, la ciudad rodeada de un muro defensivo acompañado de torres de observación y el puerto fue ampliado, siendo protegido mediante una cadena que lo cerraba en caso de peligro. Los cercanos castillos bizantinos de San Hilarión, Buffavento y Kantara también fueron reforzados, constituyéndose así un sistema defensivo que protegía a la ciudad de ataques por mar o por tierra.
La fortaleza de Kyrenia jugó también un papel importantísimo en las disputas entre los francos y en los conflictos con los genoveses.
Con el dominio veneciano, el castillo de Kyrenia fue nuevamente modificado para hacer frente a la nueva amenaza que constituía el mayor poder de los cañones. Las estancias reales y tres de sus cuatro torres fueron derribadas y reemplazadas por torres circulares más anchas que podían resistir mejor a la artillería. Sin embargo, eso no fue suficiente, ya que la ciudad fue tomada por los turcos en 1570.
Bajo el dominio turco, la economía de la ciudad declinó, y esta pasó a ser esencialmente sede de una guarnición militar. La población cristiana fue expulsada de la ciudad fortificada, y nadie que no fueran los artilleros y su familia fue autorizado a residir dentro del castillo. Parece ser que la guarnición aterrorizaba a los habitantes de las villas vecinas, fueran musulmanes o cristianos, y solo permanecieron unos pocos mercaderes y pescadores, que construyeron sus casas fuera de los muros. La ciudad resurgió ligeramente cuando las autoridades otomanas autorizaron el comercio marítimo con Asia Menor y las islas del Egeo.
Gran Bretaña, dueña de Chipre desde 1878, no realizó grandes cambios. En la primera década del siglo XX, Kyrenia, era una bulliciosa y pequeña ciudad, un lugar de vacaciones para familias de la capital. En 1922, tras la construcción de una nueva catedral, se restableció en Kyenia la sede metropolitana. El mismo año, la guerra grecoturca impidió todo comercio con la costa de Anatolia, Surgieron iniciativas para hacer de Kyrenia un centro turístico internacional; lo que es en la actualidad.
LÁRNACA
La moderna ciudad de Lárnaca, la tercera mayor de la isla después de Nicosia y Limassol, y el segundo puerto comercial, situada en el SE de Chipre se asienta sobre el emplazamiento de la antigua ciudad-estado de Kition, rico puerto de mar e importante centro para el comercio del cobre a la largo de la Edad del Bronce.
La tradición afirma que Kition fue fundada por Kittim, nieto de Noé. Sin embargo las excavaciones arqueológicas indican que se fundó en el siglo XIII a.C. Poco después los aqueos colonizaron la ciudad y la fortificaron con ciclópeas murallas. Durante los siglos XII y XI a.C. la isla sufrió oleadas masivas de aqueos asentándose por toda la isla y difundiendo la lengua griega, su religión y sus costumbres, creándose ciudades-estados.
En el siglo IX a.C. los fenicios conquistan Kitión y consagran el santuario griego al culto de la diosa Astarté. La ciudad se convirtió en un centro de exportación de cobre, extraído de las vecinas minas de Tamassos, y dependiente de la fenicia ciudad de Tiro, apareciendo en el Antiguo Testamento. Durante el siglo VIII a.C. vivió un periodo de gran prosperidad.
Durante varios siglos la ciudad, al igual que la isla, sucumbió a los ataque de los Imperios: Asirio, Egipto y Persa, aunque mantuvo su prosperidad. El rey Evagoras de Salamis (que reinó desde 411 al 374 a. C) unificó Chipre y convirtió la isla en uno de los principales centro culturales del mundo griego. Más tarde fue colonia griega y cuna del filósofo Zenón (hacia 334 a.C. - 260 a.C.), fundador de la escuela estoica en Atenas.
La importancia económica de Chipre y la expansión del Imperio Persa por el Egeo hizo intervenir a los griegos, y así el general ateniense Cimón, a instancias de Pericles, emprendió en el otoño-invierno del 451 a. C una expedición contra los persas para reconquistar Kitión. En el año 450 a.C. Cimón murió en una gran batalla contra los persas; en su lecho de muerte instó a sus generales a que ocultaran su muerte tanto a sus aliados como a los persas.
Entre 333 a. C. y 325 a. C., Alejandro Magno derrota al Imperio Persa, y Chipre pasa a formar parte del Imperio Macedonio. Tras su muerte y el reparto de su Imperio entre sus generales, Chipre queda integrada en el reino de los Ptolomaico de Egipto, hasta que a mediados del siglo I a. C. pasó a dominio romano.
Durante el siglo I d.C. fue la segunda patria de Lázaro, el amigo de Jesucristo resucitado en Betania, que fue nombrado primer obispo de Chipre por san Pablo y san Bernabé. Después del hundimiento del puerto de Kitión, (Citio) se construyó uno nuevo a un kilómetro de la playa. Este puerto fue muy importante hasta la época romana pero decayó cuando comenzaron las incursiones árabes (siglos VII-X). Cuando los árabes dejaron de atacar Chipre, se creó en la costa una población que fue llamada Skala, conocida durante la dominación franca, también como Alikeso Aliki, debido al lago salado que hay a muy poca distancia (aliki en griego). La sal que se extraía de este lago constituía una importante fuente de ingresos para los habitantes de este lugar. Poco a poco, se fueron estableciendo allí muchos comerciantes procedentes de todos los lugares. En las crónicas, Skala es mencionada como la ciudad de los consulados.
Durante la ocupación veneciana, se realizaron pocas obras en la ciudad ya que los venecianos estaban más interesados en la explotación de los ricos recursos de la región. Por este motivo, no fue difícil para los turcos conquistarla en 1570. Bajo el Imperio Turco Otomano la ciudad continuó siendo un centro diplomático y comercial. Se cree que en esta época fue llamada Lárnaca debido a los numerosos sarcófagos que fueron encontrados en la región (Lárnaca significa sarcófago en griego).
Más tarde, durante la administración británica los consulados fueron trasladados a Nicosia y el puerto perdió importancia debido a la creación de los puertos de Famagusta y de Limassol.
Durante las últimas décadas y sobre todo después de los acontecimientos de 1974 Lárnaca ha experimentado un importante desarrollo económico.
LIMASSOL (Lemesos)
La ciudad de Limassol, conocida en griego como “Lemesós”, está situada junto a la bahía de Akrotiri, en el centro de la costa meridional de Chipre, siendo su puerto comercial uno de los más importantes del Mediterráneo.
Se desconoce el momento exacto de su fundación y su nombre original, ya que al encontrarse entre dos importantes ciudades: Kourion y Amathous, careció de importancia durante la antigüedad. Durante el periodo paleocristiano había en este lugar un pequeño asentamiento, cuyo nombre se desconoce, que vivía de la ganadería y la pesca. Durante los primeros años del período bizantino se mencionan los nombres Neapolis o Theodosias para designarlo. A finales del siglo XII, tras la destrucción de Amathous por el rey inglés Ricardo “Corazón de león” empezó a utilizarse el nombre de “Neapolis”, y la ciudad comenzó a desarrollarse, lo que hace que a veces se considere esta fecha como inicio de su historia. Sin embargo, hallazgos arqueológicos indican la presencia de tumbas de diferente cronología; unas se remontan al 2000 a.C., mientras que otras han sido datadas de los siglos VIII al IV a. C. También hay noticias de la existencia entre los siglos V al VIII de un obispo. Los soberanos francos de la dinastía Lusignan edificaron un pequeño castillo sobre cimientos anteriores del período bizantino, experimentando un notable crecimiento, y fue la sede del obispado latino hasta la ocupación turca.
Pero la historia de Limassol, propiamente dicha, comienza con la llegada del rey Ricardo I “Corazón de León” durante la Tercera Cruzada (1189-1192), a finales del siglo XII cuando el rey inglés venciera a Isaac Comnemo, destruyendo Amathous y trasladando a sus habitantes a Limassol. A partir de ese momento comenzó para la ciudad un nuevo periodo. En 1191 el castillo de Limassol se convirtió en enclave histórico, al celebrase en su interior la regia boda entre el rey cruzado Ricardo “Corazón de León” y la princesa Berenguela, hija de Sancho IV de Navarra, siendo proclamada reina de Inglaterra y Chipre.
Durante el siglo XIII, el asentamiento de comerciantes en Chipre y particularmente en Limassol llevó prosperidad a sus habitantes. Su puerto se convirtió en un destacado centro de transporte y comercio, contribuyendo en gran medida al desarrollo económico y culturas de la urbe.
En el año 1228 Limassol fue ocupada por el emperador germánico Federico II Barbarroja, quien se había puesto al frente de la Sexta Cruzada. Había llegado a la isla llamado por los Templarios, enemigos del regente local Juan de Ibelín. Federico ocupó la isla y depuso a Ibelín, pero el año siguiente las fuerzas que había dejado allí fueron derrotadas en la batalla de Agirta (cerca de Kyrenia) por los seguidores de Ibelín, lo que significó el fin del dominio germánico en la isla.
Limassol fue también testigo de los ataques de los mamelucos de Egipto. El puerto se había convertido en un refugio de piratas que hacían estragos en las costas del Mediterráneo oriental, lo que provocó el envío de una fuerza militar por parte del sultán egipcio en 1424. Como resultado, Limassol fue saqueada e incendiada, y al año siguiente llegaron nuevas tropas mamelucas que también saquearon Famagusta y Lárnaka, ocupando de nuevo el castillo de Limassol. En julio de 1570 los turcos otomanos se apoderaron de la ciudad sin encontrar resistencia.
Las descripciones otomanas de la época nos informan de que en el lugar habitaban cristianos, griegos y turcos distribuidos en diferentes barrios. Según los visitantes extranjeros durante la ocupación turca Limassol se había convertido en un pueblo miserable.
Los británicos se apoderaron de Chipre en 1878, siendo el primer gobernador de Limassol el coronel Warren, convirtiéndola en un lugar habitable y agradable. Con la administración británica aumentó la calidad de vida y comenzaron a desarrollarse el comercio y la industria.
Con la independencia de la isla la ciudad experimentó un gran desarrollo demográfico y económico, seguido tras 1974 por un explosivo ascenso en todos los sectores. Se convirtió en el centro turístico y comercial más importante de Chipre y en el mayor puerto de la isla.
NICOSIA (Lefkosia)
La ciudad de Nicosia se encuentra en la llanura central de Chipre. Es la ciudad más grande y la capital de la isla desde la Edad Media. La zona estuvo habitada desde tiempos remotos. Cerca de la actual Nicosia, junto al cauce del río Pediaios, que nace en los Montes Troodos y desemboca en la bahía de Famagusta, se han encontrado restos arqueológicos que datan del Calcolítico. Durante Edad del Bronce -periodo muy próspero para Chipre debido a la producción de metal- surgió una pequeña ciudad-estado llamada Ledra, cuyo rey, Onasagoras aparece mencionado en noveno lugar en la lista de homenajeadores del rey asirio Asardón, datada en el 672 a.C. y hallada en Ninive.
Poco más se sabe de sus orígenes y primer desarrollo y es muy probable que este reino dependiera de otros vecinos más poderosos. De hecho, el monarca Nikoklis de Pafos levantó un templo dedicado a Afrodita para los ciudadanos de Ledra. Reconstruida por Lefkos, hijo de Ptolomeo I, alrededor del 300 a.C. Ledra fue en tiempos helenísticos y romanos una pequeña e insignificante ciudad de población agrícola, también conocida como “Lefkothea (“la diosa blanca”). Siglos más tarde adoptó el cristianismo, y en tiempos de su primer obispo, Trifillius (declarado santo en el 448), la ciudad se llamaba Lefkousia (“ciudad blanca”) o Ledra.
Debido a las incursiones árabes del siglo VII, muchos habitantes de las poblaciones de la costa se trasladaron al interior de la isla, y así durante el periodo bizantino Lefkosia fue creciendo en importancia, de forma que hacia el siglo X puede considerarse ya capital de la isla, en cuyo castillo residía el gobernador bizantino. Aquí fue donde el príncipe imperial Isaac Comneno se sublevó contra el emperador bizantino Andrónico I, en 1191, e independizó Chipre, gobernándolo hasta 1191.
En el siglo XII, a raíz de la Tercera Cruzada y de la venta de Chipre por Ricardo Corazón de León a los Templarios, estos instalaron su sede en el castillo de Nicosia. Las desavenencias con la población les llevó en 1192 a desprenderse de su posesión, que fue adquirida por los “Lusignan”. Ese mismo año, la dinastía francesa la convirtió en su sede chipriota, adoptando el nombre latino de “Nicosia” (que significa “ciudad de la victoria”). El rey Enrique I levantó hacia el 1211 una nueva fortaleza. Durante la ocupación franca, Nicosia continuó siendo el centro administrativo de la isla, se reforzaron las defensas, levantando las primeras murallas de la ciudad, y se construyeron palacios, monasterios e impresionantes iglesias donde se realizaba la coronación de los reyes.
En 1489 pasó a formar parte de la República de Venecia. Las viejas murallas medievales resultaban insuficientes frente a la nueva tecnología militar y con el fin de proteger a los habitantes de la ciudad del inminente ataque otomano, los venecianos decidieron construir un impresionante sistema defensivo; En 1567 se inició la construcción de un soberbio cinturón de murallas con once bastiones y 4,5 km de perímetro, rodeado por un foso nutrido por el cauce desviado del río Pendiaios. Murallas que no impidieron la conquista de la ciudad por los otomanos. Estos comenzaron su asedio el 22 de Julio de 1570, levantando cuatro fuertes de tierra alrededor de la urbe y aproximándose mediante zanjas y trincheras a sus muros. Por fin, el 9 de Septiembre se inició un enérgico ataque que logro rebasar el bastión de Podocataro e introducir a los otomanos en la ciudad. Durante esa jordana fueron asesinados unos 20.000 de sus habitantes.
Durante la ocupación turca, Nicosia, llamada por los turcos “Lefkosia”, continuó siendo la capital de Chipre. Fue una época de decadencia económica y cultural. Muchas iglesias francas fueron convertidas en mezquitas y parte de la ciudad abandonada.
A partir del 1878 los británicos lograron reactivar la vida urbana, al ejercer de nuevo, y a todos los efectos, como verdadera capital de la isla. Durante la administración británica, fue construido en madera el palacio presidencial en el mismo lugar donde se encuentra ahora. Fue entonces cuando la ciudad comenzó a extenderse fuera de las murallas. Además, la red de carreteras fue ampliada para comunicar Nicosia con otras regiones de la isla. Este desarrollo tuvo como consecuencia el aumento de la población de la ciudad.
Tras la proclamación de la independencia de la isla en 1960, la población de Nicosia aumentó debido al éxodo rural y a la concentración de las actividades económicas, administrativas y educativas en la ciudad.
En 1974, tras la invasión turca del norte de la isla, Nicosia se convirtió en capital de dos Estados: la República Turca de Chipre del Norte, sólo reconocida por el régimen de Ankara y poblada por habitantes de origen turco; y la República de Chipre, la única que la comunidad internacional admite como legítima, poblada por griegos.
SALAMINA (Salamis)
Salamina (en griego “Salamis”) ubicaba en la desembocadura del rio Pediaios, fue una de las ciudades-estado más importantes de la Antigüa Chipre. Sus soberbias ruinas helenísticas, romanas y paleocristianas atestiguan su grandeza durante siglos y constituyen, sin duda, el mayor yacimiento arqueológico de Chipre, en su mayoría aún sin excavar.
Según la leyenda había sido fundada por el héroe Teucro, hermano de Ayax y uno de los participantes en la Guerra de Troya. Los primeros hallazgos arqueológicos se remontan a finales de la Edad de Bronce (siglo XI a. C), indicando una presencia fenicia, sobre todo en la necrópolis, donde se descubrieron esqueletos de niños enterrados en tinajas.
Fue una de las ciudades-estado más importantes de Chipre. Rindió tributo a asirios y persas. Su prosperidad queda patente en el hecho de que su rey Evelthon (560-525 a.C.) fue el primer monarca isleño en acuñar moneda de plata.
Fue escenario de guerras entre griegos y persas. Al estallar la sublevación jonia contra Persia (499 a.C.) algunos gobernantes chipriotas se pusieron del lado de los griegos. Onesilos expulsó a su hermano Gorgo, el rey de Salamina, y se apoderó del trono dirigiendo la revuelta. Sin embargo el rey persa Darío envió una flota al mando de Artybius que lo derrotó en la primera batalla naval de Salamina (498 a.C.) Onesilos murió y Gorgo recuperó el poder.
Más tarde el militar y estadista ateniense Cimón dirigió en el 449 a.C. una expedición de 200 navíos que puso sitio a Kition. Fracasó y acabó falleciendo de enfermedad o a causa de una herida ese mismo año. La flota griega quedó entonces al mando de Anaxicrates, quien también en el mismo año derrotó a los persas en la segunda batalla naval de Salamina: Sin embargo, poco después abandonaría la isla, tras acordarlo con sus enemigos por la Paz de Calias (448 a.C.). Salamina se convirtió en la ciudad más importante de la isla gracias a su rey Evágoras (410-374 a.C.) que acuñó moneda de oro, cambió el silábico chipriota por el griego, participó en las Guerras del Peloponeso contra Esparta apoyando a Atenas y llegó a enfrentarse contra el rey persa Artajerjes II, siendo derrotada su flota por los persas en el 381 a.C. Desde entonces se convirtió en un vasallo, muriendo asesinado junto a su hijo Phytagoras en el marco de un complot palaciego.
Formo parte del Imperio de Alejandro Magno. Tras su muerte, sus generales se repartieron el Imperio. Chipre fue objeto de la lucha entre Ptolomeo (quién ya dominaba la isla) y Demetrio, y aunque este logró derrotar a su oponente en la Batalla de Salamina (308 a.C.), al final fué Ptolomeo quién logró quedarse con Chipre. En tiempos de los Ptolomeos la capitalidad de la isla pasó a Paphos, pero Salamina siguió siendo un próspero centro comercial.
Bajo el Imperio Romano, Salamina fue especialmente favorecida por los emperadores Trajano y Adriano, que levantaron y restauraron edificios públicos. En su activo puerto desembarcó San Pablo en el año 45 d.C. iniciando la evangelización de la isla, y según la tradición, san Bernabé (discípulo chipriota de san Pablo) murió apedreado en Salamina hacia el año 61. No faltaron momentos de tensión, como cuando los judíos chipriotas, que formaban una colonia bastante numerosa, se sublevaron en el año 116 en solidaridad con los judíos de Palestina. Un hecho que provocó la intervención de las tropas romanas.
Bajo el Imperio Bizantino continuó su importancia siendo también embellecida con basílicas. Durante la primera mitad del siglo IV, la ciudad se vio muy afectada por lo varios terremotos. El emperador Constancio II (337-361) se preocupó por reparar los daños producidos, perdonando incluso el pago de sus impuestos. La ciudad llegó a llamarse Constancia en honor de su protector y a recuperar su capitalidad.
Durante mil años Salamina fue la ciudad más importante de la isla gracias a su magnífico puerto, sin embargo la colmatación de la bahía condujo a un declive gradual de la urbe, siendo finalmente abandonada en el siglo VII durante las incursiones árabes.
Salamina fue finalmente abandonada durante las incursiones del siglo VII, momento en que sus habitantes se trasladaron a la vecina Arsinoe (Famagusta).
Las ruinas de Salamina ocupan una amplia superficie, que se extiende junto a la playa. Destacan el gimnasio, con su elegante pórtico de columnas, que todavía conserva parte del pavimento bizantino y la esculturas (decapitadas) que lo decoraban, las letrinas, las termas romanas (remodeladas en época bizantina), el teatro de epoca del emperador Augusto, con capacidad para más de 15.000 espectadores, que formaba parte de un complejo que incluía el odeon o sala de conciertos y un pequeño estadio, la enorme basílica de Agios Epifanios (definida por las bases de sus columnas), el foro romano con sus columnas de granito rosa, originarias de Asuán, presidido en su tiempo por un templo dedicado a Zeus (de origen antiquísimo, aunque los restos aparecidos corresponden al periodo tardohelenístico), la basílica de Kambanopetra (Campana Pétrea) donde se hallaron los mosaicos en mármol de los príncipes dignatarios de la ciudad, su acueducto de 56 km y finalmente su necrópolis. La mayoría de sus tumbas corresponden a los siglos VIII y VII a. C. y en ellas se hallaron sobre todo esqueletos de caballos sacrificados, joyas de oro y piezas de marfil. La más importante y famosa e la conocida como “Carcel de Santa Catalina” Se trata de un gran montículo de piedra abovedado, corresponde al periodo romano, aunque se construyera sobre una tumba anterior.
DATOS ÚTILES
Moneda
La moneda en la República de Chipre es el Euro (EUR).
La República Turca del Norte de Chipre no tiene moneda propia y utiliza la nueva lira turca (YTL).
Diferencia Horaria
Chipre se encuentra en el huso horario de Europa Orienteal. En verano (entre finales de marzo y finales de septiembre) hay tres horas de adelanto con respezto a la hora media de Greenwich; en invierno hay dos horas de diferencia. Respecto del horario español es una hora más.
Corriente Eléctrica
La electricidad en la República de Chipre funciona a 220 V. Los enchufes suelen tener tres patillas planas, los hoteles disponen de adaptadores para los enchufes.
Trámites fronterizos
Los ciudadanos españoles no necesitan visado para entrar a la República de Chipre. Para acceder a la República Turca del Norte de Chipre solo es necesario pasaporte en regla.
Teléfonos de Interés
Embajada de España en Chipre: Leofrs Strovolou 32, 4º planta. 2018 Strovolos, Nicosia.
Telefonos: 357 22 04 10, 357 22 45 04 12
Urgencias: 357 99 58 19 53
Transporte
La red viaria en Chipre es buena y esta bien señalizada y se circula por la izquierda. Un servicio de autobuses conecta las principales localidades.
Propinas
La mayoría de los restaurantes incluyen tasa de servicio en la cuenta, pero es costumbre dejar una propina para los camareros.
Ropa
Entre los meses de octubre a mayo es aconsejable llevar alguna prenda de abrigo.
En los meses de verano prendas de lino y algodón.
Siempre hay que llevar calzado cómodo y adecuado para las visitas y excursiones, gorra o sombrer y gafas de sol.
Si desean bañarse en playas o piscinas es recomendable bañador.
Para entrar en las mezquitas e iglesias las señoras deberán llevar pañuelo para cubrir la cabeza y pantalón o falda larga, y los caballeros, pantalón largo.
FORTALEZAS
CASTILLO DE KYRENIA
En un lugar privilegiado de la costa norte de Chipre, bañado por las aguas del Mar Mediterráneo y teniendo como telón de fondo la Cordillera de Pentadáktylos, los romanos construyeron un baluarte defensivo. Aún no se ha podido determinar la fecha exacta, pero las excavaciones llevadas a cabo en su interior han revelado hallazgos romanos, e incluso helenísticos.
Los emperadores bizantinos remodelaron el castillo romano de Kyrenia ante la amenaza de las incursiones árabes; su importancia creció cuando los árabes destruyeron la vecina población de Lambousa en el año 806. En el siglo XII su castillo era considerado el refugio más seguro de la isla, y allí se cree que Isaac Comnemo, el último gobernador bizantino de Cripre, enviara a su familia y sus tesoros antes de enfrentarse a Ricardo “Corazón de León” en 1191. De hecho, la primera referencia historica al castillo data del año 1191, cuando el rey de Inglaterra, Ricardo “Corazón de León” en su camino a la Tercera Cruzada, lo capturó al derrotar al rey Isaac Comnemo con convertirse en dueño y señor de la isla. Después de un corto período de tiempo, el rey Ricardo vendió la isla primero a los Caballeros Templarios y poco después a su primo Guy de Lusignan, ex-rey de Jerusalén. Así comenzó el dominio de la dinastía franca de los Lusignan en Chipre, que duró unos 300 años (1192-1489).
Bajo el dominio franco, las villas del distrito de Kyrenia se transformaron en territorios feudales, y la ciudad paso a ser, nuevamente, el centro administrativo y comercial de la zona. Su castillo fue ampliado entre 1208 y 1211, durante el reinado del rey Juan d'Ibelin. La ciudad rodeada con un muro defensivo acompañado de torres de observación, y el puerto fue ampliado y protegido con una cadena que lo cerraba en caso de peligro. Los cercanos castillos bizantinos de San Hilarión, Buffavento y Kantara también fueron reforzados, constituyéndose así un sistema defensivo que protegía a la ciudad de ataques por mar o por tierra.
La fortaleza de Kyrenia jugó también un papel importantísimo en las disputas entre los francos y en los conflictos con los genoveses, llegando a ser casi totalmente destruido durante los bombardeos genoveses en 1373.
En 1489 los venecianos tomaron control de la isla, y el castillo de Kyrenia fue restaurado y ampliado, para hacer frente a la nueva amenaza que constituía el mayor poder de los cañones. Se reforzaron los muros, adquiriendo un enorme espesor, las estancias reales y tres de sus cuatro torres fueron derribadas y reemplazadas por torres circulares más anchas que podrían resistir mejor a la artillería, convirtiéndola en una poderosa fortaleza, y adquiriendo el aspecto que ha llegado hasta nuestros días,
Sin embargo, eso no fue suficiente, ya que la fortaleza fue tomada por los turcos en 1570. Durante los siglos de ocupación otomana se añadieron dependencias en su interior. Bajo el dominio británico la fortaleza sirvió de prisión y escuela militar. Tras la independencia de Chipre, se instaló en el un Cuartel de la Guardia Nacional durante los primeros años.
Hoy en su interior se puede visitar: el cuarto de presentación, las mazmorras, la iglesia de San Jorge, el sitio neolítico, la columna veneciana, el aljibe, la Torre de Lusignan y el Museo del Naufragio que contiene los restos hallados en 1968 de un barco mercante del siglo IV a.C. que desde la isla de Samos se dirigía a Anatolia naufragando frente a la costa norte de la isla con todo su cargamento, 400 ánforas de arcilla, que contenían vino y aceite.
CASTILLO DE KOLOSSI
En una fértil llanura, a pocos kilómetros de la ciudad de Limassol, se halla el pequeño y encantador castillo de Kolossi; el castillo medieval mejor conservado de Chipre.
En 1191, tras la conquista de Chipre por rey de Inglaterra, Ricardo I “Corazón de León” en su camino hacia Tierra Santa, para dar comienzo a la Tercera Cruzada, derrotó al rey Isaac Comnemo, convirtiéndose en dueño y señor de la isla. Poco después Ricardo vendió la isla a su primo Guido de Lusignan, ex-rey de Jerusalén. Así comenzó el dominio de la dinastía franca de los Lusignan en Chipre, que duró unos 300 años (1192-1489).
Los primeros reyes Lusignan crearon en estás fértiles tierra un gran feudo y según algunas fuentes, ellos fueron los constructores del castillo de Kolossi. En 1210 el rey de Chipre Hugo I hizo donación de él a los caballeros hospitalarios de San Juan de Jerusalén, convirtiéndose rápidamente en la propiedad más rica de la Orden, controlando toda la comarca (unas setenta poblaciones) y cultivando viñedos y caña de azúcar. Construyeron un castillo desde el que vigilar sus preciadas posesiones y el cercano mar, y tras la caída de San Juan de Acre en 1291, Kolossi se convirtió en Cuartel General del Gran Maestre de la Orden y pasó a ser conocido como la Gran Comandancia de los Caballeros de la Orden de San Juan de Jerusalén. El vino dulce que fabricaban (y que sigue fabricándose hoy) fue llamado Commandaria por el nombre del feudo.
Los genoveses y los mamelucos lo saquearon en diversas ocasiones entre finales del siglo XIV y comienzos del XV, dejándolo en ruinas.
El castillo de Kolossi fue reconstruido a mediados del siglo XV por Louis de Magnac. Se conserva en muy buen estado, tiene 23 metros de altura y sus muros tienen un grosor de unos 3 metros.
Un puente levadizo daba entrada a la primera planta, donde se encontraba el comedor, cuyas paredes estaban decoradas con pinturas. Aún se conservan restos del fresco de la Crucifixión con el estuco de armas del Maestre de Magnan. La sala contigua alberga la cocina. La planta baja se empleaba de almacén (incluye dos cisternas subterráneas) y al alta como dormitorio, donde se conservan la chimenea de piedra. Una estrecha escalera permite llegar al adarve.
CASTILLO DE LIMASSOL
En pleno casco histórico de la ciudad Limassol, muy cerca del puerto se encuentra su castillo medieval, que tenía por finalidad vigilar y proteger el puerto y la ciudad en si, y que hoy alberga el Museo Medieval de Chipre.
Aunque la referencia escrita más antigua del castillo se remonta al año 1228, las evidencias arqueológicas indican que existió un castillo bizantino, posiblemente construido hacia año 1000. Aunque de reducidas dimensiones jugó un importante papel en la Historia, ya que la tradición sitúa en su capilla la celebración de la real boda de Ricardo I “Corazón de León” con Doña Berenguela, hija de Sancho IV de Navarra, en el año 1191, siendo de este modo proclamada reina de Inglaterra y Chipre.
Ya en manos de la dinastía franca de los Lusignan, el castillo fue remodelado a lo largo de los siglos XIII y XIV. Este castillo medieval fue gravemente afectado por los ataques genoveses que tuvieron lugar en el año 1373, cuando los textos indican que el castillo fue asaltado y la ciudad incendiada. Durante el siglo XIV los viajeros informan del estado ruinoso de la ciudad, casi abandonada. Parece ser que el castillo fue sometido a reparaciones a comienzos del siglo XV, ya que era un elemento fundamental para la defensa de la ciudad contra el ataque de los genoveses (1402 y 1408). Una lápida del siglo XIV encontrada durante la construcción de la iglesia de Panadia Katholiki, representa un castillo con tres torres, que podría estar haciendo referencia al castillo de Limassol durante este periodo.
En 1412 el castillo resistió con éxito los primeros ataque de los mamelucos egipcios, pero no pudo hacer frente a los ataques de 1425, probablemente debido a los datos sufridos en la fortaleza trece años antes y a los terremotos posteriores. En 1491 un nuevo terremoto golpeó severamente la fortaleza, y por último, 4 o 5 años antes de la invasión otomana de 1570, y debido a la decisión tomada por los venecianos de cambiar su defensa al eje Kyrenia – Nikosia – Famagusta, el castillo fue demolido para evitar que pudiera ser tomado por los invasores.
La fortaleza actual data de finales del siglo XVI (1590), inicios de la época otomana. En esta fase arquitectónica fueron incorporaron los restos del castillo medieval. Su planta es rectangular y el espesor de sus muros supera los dos metros.
Los turcos la utilizaron como prisión y durante la II Guerra Mundial el ejército británico la convirtió en sede de su Cuartel General.
En la actualidad alberga el Museo Medieval de Chipre, que exhiben pieza que pertenecen a los siglos comprendidos entre el período paleocristiano y el final de la ocupación turca. Durante el periodo de 1963 – 1974 fue un puesto de vigilancia de la Guardia Nacional. En la actualidad alberga el interesante Museo Medieval de Chipre.
CASTILLO DE SAN HILARION
Al norte de Chipre, en la estribaciones de la codillera del Pentadáctilo, en lo alto de una montaña, perfectamente adaptado a la topografía del rocoso terreno y situado frente al mar Mediterráneo, se halla una de las principales fortalezas medievales de Chipre, San Hilarión; el baluarte más impresionante de todo Chipre.
El nombre procede del eremita palestino del siglo IV que, considerándose demasiado conocido en su tierra natal y en Egipto, decidió trasladarse a Chipre, eligiendo este bello emplazamiento como lugar de retiro y meditación, muriendo hacia el año 371. Sobre el lugar y en su memoria, siglos después los bizantinos construyeron una iglesia y un monasterio, procediendo en el siglo XI a fortificar el área.
El castillo original fue construido por los bizantinos con fines defensivos, posiblemente a finales del siglo XI, y formaba parte una cadena de castillos levantados en el norte de la isla (castillos en Kyrenia, Buffavento y Kantara) contra los ataque árabes (del siglo VII al X).
El castillo fue conquistado por Ricardo Corazón de León, en 1191. Su inmejorable posición, vigilante ante posibles ataques desde el mar y como puesto avanzado en la defensa de Nicosia, empujó a los reyes Lusginan a reforzar sus muros defensivos, llegando incluso a utilizarlo como residencia de verano gracias a su clima. Por aquel entonces se conocía como Dieu d’Amour, palabras francesas posiblemente derivadas del nombre bizantino de Dydimos (dos gemelos) así denominado el castillo por las dos crestas que lo coronan.
El castillo desempeñó un importante papel en la lucha por el dominio de Chipre entre el emperador germano Federico II Barbarroja (de regreso de la Sexta Cruzada) y Jean d`Ibelin (virrey franco de Chipre), entre 1228 y 1231. También fue vital durante la invasión genovesa de 1373.
A finales del siglo XV (1489) los venecianos desmantelaron parte de la fortaleza para reducir costos defensivos.
En el año 1964 el lugar fue ocupado durante un tiempo por activistas turcochipriotas, en lugar contra la comunidad griega.
La muralla exterior ofrece una planta completamente irregular, perfectamente adaptada a la orografía del terreno, alcanzando los 725 m de altitud en su parte más alta. El castillo está formado por tres secciones principales que fueron construidas en diferentes niveles. La sección primera, es decir la inferior, contiene los establos, cisternas y otras dependencias dedicadas a los soldados y trabajadores del castillo; la barbacana que protege la entrada principal se fortificó con torres en forma de herradura. La segunda sección alberga una hermosa iglesia de estructura bizantina, coronada con cúpula, el salón de banquetes, los aposentos reales, la cocina, cisterna, despensa, baños. La entrada sólo era posible a través de una gran puerta y un puente levadizo. La tercera sección, posee un jardín interior, con habitaciones reales (del periodo Lusignan), cocina equipada con un horno, cisternas y edificios subsidiarios.
MURALLAS DE FAMAGUSTA Y CIUDADELA (Torre de Otelo)
La Ciudadela (o acrópolis) de Famagusta, conocida con el nombre de Torre de Otelo es un enorme castillo construido bajo el reinado de Enrique II de Lusignan entre los años 1283 y 1324, para defender el puerto de la ciudad, aprovechando unos afloramientos rocosos. Esta fortaleza de planta cuadrada con torres circulares en sus esquinas (las dos torres delanteras dan al mar y las otras dos a la ciudad) con un amplio patio interior, conserva casamatas y salas abovedadas. Desde el castillo salía un espigón fortificado que protegía el puerto, cuya entrada se cerraba mediante una cadena.
La ciudadela se conoce como Torre de Otelo, ya que la obra de Shakespeare está ambientada en Famagusta.
A finales del siglo XV, ante el peligro que suponía el avance del Imperio Turco los venecianos decidieron consolidar sus fortificaciones en Chipre, y en Famagusta idearon y construyeron un complejo e inexpugnable sistema defensivo, que integró la ciudadela medieval levantada en el siglo XIII por los reyes francos para proteger el puerto, remodelándola en 1492 bajo la supervisión de Niccoló Foscari, cuyo nombre aparece en el relieve de la puerta de acceso al castillo, junto a dos leones de San Marcos (símbolo de Venecia).
Los venecianos rodearon Famagusta de un poderoso cinturón de murallas, cuya forma recuerda a un cuadrilátero irregular, de unos tres kilómetros y medio de perímetro, con foso exterior. Los muros conservados tienen hasta 15 metros de altura y 8 de grosor, e incluye 15 bastiones cuyas formas son esencialmente triangulares. Las dos puertas principales son: la Puerta de Tierra y la Puerta del Mar.
La Puerta de Tierra (Kara Kapisi). Se abre en el costado sur. Esta defendida por el bastión Ravettina o Revelin llamado por los turcos Akkule (Torre Blanca) por considerarse que aquí se alzó la bandera de la rendición en 1571, de forma triangular peraltada. En origen, este bastión fue construido en tiempos de los Lusignan a modo de torre albarrana situada fuera de los muros de Famagusta. Su función era proteger la entrada principal a la ciudad. A finales del siglo XV los venecianos lo incorporaron a los nuevos muros, convirtiéndolo en una enorme estructura erizada de troneras, que incluía un puente levadizo. En el 1619 los otomanos añadieron una pequeña mezquita para los guardianes del lugar.
La Puerta del Mar (Deniz Dapisi). Se encuentra en el lado este, integrada en un bastión circular. En un arco semicircular aparece el nombre Niccolo Prioli, el blasón del arquitecto, la fecha de construcción 1496. Junto a esta puerta descansa la escultura de un enorme león, esculpido en mármol, al parece procedente de las vecinas ruinas de Salamina.
Famagusta resistió heroicamente durante once meses bajo el mando del comandante veneciano Marco Antonio Bragadino, peri finalmente los turcos se apoderaran de ella.
Siglos más tare, en el extremo sudeste los brítanicos abrirían la llamada puerta de Canbulat. Tomando el nombre del bastión homonimo, donde al parecer se produjeron violentos combates durante el asedio de 1571, y donde falleció heroicamente el comandante otomano Canabulat.
LUGARES
CHOIROKOITIA
Sobre la ladera de una colina se extienden los restos de este gran asentamiento neolítico, el más antiguo de Chipre, el mejor conservado de todo el Mediterráneo oriental.
Se trata de un importante asentamiento neolítico en excelente estado de conservación, declarado por la UNESCO en 1998 Patrimonio Cultural de la Humanidad. El lugar fue descubierto en 1934 por Porfyrios Dikaios que llevó a cabo varias campañas de excavación entre 1934 y 1946 para el Departamento de Antigüedades, y constituye el ejemplo más importante de la civilización neolítica chipriota surgido a finales del VII milenio a. C.. A través de sus consecutivas fases de construcción ofrece una imagen completa del Neolítico chipriota.
Hacia el comienzo del IX milenio a. C. gentes procedentes del continente llegaron a Chipre, introduciendo nuevas especies de plantas y animales. Parece que poco a poco esta población perdió sus conexiones con su lugar de origen y, en su aislamiento insular se convirtió en una civilización única, conocida como el Reciente Neolítico Acerámico Chipriota -acerámico porque la habilidad de la alfarería era desconocido-. El yacimiento de Choirokoitia proporciona un buen ejemplo de esta fase de cultura neolítica en su apogeo durante la segunda mitad del milenio VII a.C.
Sus habitantes eligieron para su emplazamiento un punto estratégico y fácilmente defendible gracias al meandro del rio Maroni que lo cierra por los costados norte, este y sudeste, y que en su momento fue a su vez defendido mediante una muralla; actividad constructiva que implicaba un trabajo colectivo. Muralla construida a lo largo de varias fases sucesivas, que encerró la aldea a lo largo de su ocupación. Los puntos conservados indican que llegó a tener una altura aproximada de 4 metros y 2,5 metros de espesor, consistente en una estructura de adobe recubierta el exterior con piedra caliza, que encerraban casas hacinadas, levantadas con piedra, adobe y madera.
Cada vivienda consistía en un conjunto de edificios de planta circular con techos planos, situados alrededor de un pequeño patio interior donde se llevaba a cabo la molienda, y bajo losas, en su suelo de las casas, enterraban a sus muertos en posición fetal con sus objetos personales.
La población de Choirokitia formaba una comunidad agrícola y ganadera bien organizada; cultivaba el fértil suelo (trigo, cebada, leguminosas) cazaba, criaba cabras, recolectaba pistachos, higos, aceitunas y ciruelas; hilaba, tejía y fabricaba figurillas y otros objetos de arcilla, -hallazgos que hoy se encuentran en el Museo Arqueológico de Nicosia-. En el momento de máximo desarrollo su población llegó a alcanzar las 2.000 personas.
De repente esta civilización desapareció a comienzos del VI milenio a. C aunque el lugar volvió a poblarse hacia el 4500 a. C.
ROCA DE AFRODITA (Petra tou Romiou)
En el sur de la isla, en una de las zonas más bellas de la costa chipriota, se halla un hermoso y único lugar, “la Roca de Afrodita” (Petra tou Romiou). Frente a una playa de guijarros, sobre aguas cristalinas se alzan tres enormes rocas de piedra caliza blanca, donde la mitología griega sitúa el nacimiento de la diosa Afrodita; un lugar cargado de leyendas. En este lugar Hesiodo localizó el nacimiento de Afrodita, diosa griega del amor y de la belleza, que surgió de las espumas blancas del mar sobre una concha tirada por delfines. Así lo cuenta Hesiodo en su Teogonía: “Urano (el cielo) se unió a Gea (la tierra). Cronos, uno de los hijos del mítico matrimonio, castró a su padre y arrojó los genitales al mar. El divino semen se convirtió en espuma, y de ella, frente a la costa de Chipre nació Afrodita”.
El culto a Afrodita tiene sus orígenes en el Cercano Oriente donde es identificada con la diosa Isthar mesopotámica, y Astarté, fenicia. Posteriormente los romanos la asimilaron a Venus.
Su culto fue muy popular en la Antigüedad y es origen de festivales y peregrinaciones de todas partes del Mediterráneo.
SANTURARIO DE APOLO HYLATES
A escasos kilómetros del yacimiento arqueológico de Kourion se encuentra el encantador y hoy tranquilo Santuario de Apolo Hylates.
El Santuario de Apolo Hylates fue en la antigüedad uno de los enclaves más importantes de Chipre. Data del siglo VII a.C. y fue utilizado hasta el siglo IV d.C. cuando el emperador Teodosio I declaró proscrito el paganismo.
Las actuales ruinas datan de principios de la época romana. Estaba formado por el Templo de Apolo, que ha sido restaurado en parte, pero las excavaciones han sacado a la luz otras estructuras: salas para los peregrinos, unas termas, una palestra rodeadas por una columnata y un pórtico, almacenes y un recinto sagrado.
Este santuario dedicado al dios-sol Apolo, en su faceta de Hylates o dios de los bosques estaba rodeado por un jardín sagrado con laureles, arrayanes y palmeras donde había ciervos. Según Estrabón se consideraba sacrilegio tocar el altar del Santuario del dios, y quién lo hiciera era arrojado al mar. Los peregrinos entraban por las puertas Curiana y Pafia, y depositaban ofrendas votivas junto a la residencia de los sumo-sacerdotes, que luego eran llevadas al Tesoro. Cuando éste se llenaba los sacerdotes almacenaban las ofrendas en un pozo sagrado cercano. Los arqueólogos descubrieron este escondite y las ofrendas se exponen en el Museo Arqueológico de Kourion.
A unos 500 metros al este hay un gran estadio romano, bien conservado, con capacidad para 6.000 espectadores. Acogía eventos de pentatlon, que constaba de carrera de velocidad, salto de longitud, lucha, lanzamiento de disco y jabalina.
Los terremotos, la difusión del cristianismo y las incursiones árabes ocasionaron la destrucción de santuario, quedando relegado al olvido.
TUMBAS DE LOS REYES (Kato-Paphos)
El yacimiento conocido como “Tumbas de los Reyes”, situado en Kato-Paphos, a escasos kilómetros de la moderna Pafos y junto al mar, es una fascinante e imponente necrópolis; un singular conjunto de tumbas subterráneas, de disposición laberíntica excavadas en la roca a lo largo de los periodos ptolomaico y romano (siglos III a. C al III d.C.).
Debido a su carácter monumental las tumbas fueron denominadas reales, aunque nunca sirvieron de enterramiento a soberano alguno, sino que estuvieron destinadas a ciudadanos prominentes, altos funcionarios y mandos militares desde el siglo IV a. C. al III d. C.
No es exagerado decir que las "Tumbas de los Reyes" contienen la mayor variedad de estilos arquitectónicos que se encuentran en una sola necrópolis. Desde tumbas en forma de simple fosa hasta elaboradas tumbas con atrio de columnas, que muestran influencias egipcias inspiradas en las casas realizadas en la época de los Ptolomeos en Alejandría. A pesar de la gran variedad de las tumbas, en general, se pueden dividir en tres grandes categorías.
Las tumbas pozo que presentan forma de caja rectangular excavada en la roca y estás cubiertas por una serie de losas del mismo material.
Las tumbas de cámara, cuyo origen se encuentra en la Edad de Bronce. Consiste en un “dromos” escalonado que desciende a una cámara abovedada rectangular equipada con “loculi” colocados racialmente en tres de los lados de la cámara. Estas cámaras con su techo abovedado son similares a las llamadas “tumbas macedonias”.
Las tumbas con atrio porticado que se componen de un “dromos” escalonado que conduce a un atrio porticado y cámaras funerarias a los lados. Estas son las tumbas más impresionantes de Phafos y de todo Chipre.
Las tumbas de Paphos, sin duda, estuvieron influenciadas directamente por arquitectura funeraria de Alejandría, aunque sus orígenes deben buscarse en Macedonia. Tanto las tumbas de Alejandría como las Tumbas de los Reyes tienen mucho en común con las llamadas Tumbas Macedonias. Las similitudes incluyen la construcción subterránea, la bóveda y la fachada monumental, que reproduce las fachadas de los templos con columnas dóricas y entablamentos.
El principal material utilizado para la construcción de las tumbas en Egipto y Pafos fue la roca calcárea relativamente blanda, que apenas se diferencia de la piedra caliza de Macedonia. La falta de mármol en las tres áreas en la antigüedad conduce a la propagación de una técnica común. En muchos casos se imita revestimientos de mármol. Los colores favoritos de los macedonios: amarillo, rojo, verde y azul, son encontrados tanto en Alejandría como en Pafos.
Varias tumbas de la necrópolis fueron reutilizadas en la época romana. Algunas fueron alteradas, mientras que en otras se limitaron a vaciarlas y reutilizarlas después. Durante los primeros años del cristianismo sirvieron de refugio a los cristianos perseguidos, dejando cruces y frescos en sus muros. Durante la época medieval algunas de las grandes tumbas fueron utilizadas como lugar de residencia. Mar tarde se convirtieron en cantera. Las huellas de su explotación son evidentes en vastas aberturas rectangulares en la roca, y crean un paisaje impresionante.
Mitos y leyendas surgieron a lo largo de los siglos sobre ellas, que atrajeron a cazadores de tesoros y viajeros. Uno de los saqueadores más notorios fue el cónsul estadounidense de Larnaca, Luigi Palma de Cesnolal, que no sólo desvalijó las Tumbas de los Reyes de Pafos sino también lugares como Kourion.
En 1980 el lugar fue incluido en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, llevándose a cabo, desde entonces, excavaciones y estudios sistemáticos que han permitido conocer en profundidad las características arquitectónicas y sus influencias del Egipto Ptomoloico, así como aspecto sobre las costumbres funerarias.
MITOLOGíA
AFRODITA, diosa de la belleza y del amor
Las opiniones acerca del nacimiento de Afrodita difieren. Algunos afirmarón que nació de la espuma blanca que se formó cuando Crono arrojó los genitales de Urano al mar, mientras que otros sostenían que era hija de Zeus y Dione. Todos, sin embargo, honraban y respetaban a la bellísima diosa. Su poder era el de difundir el amor, no sólo entre los mortales, sino también entre los dioses. Aunque estaba casada con Hefesto, Afrodita concedió sus favores a Ares y a otros dioses. De sus relaciones con Poseidón trajo al mundo a Érix, rey de Sicilia, mientras que también se dice que era hija suya Rodo. Afrodita se enamoró también de Dioniso y, sin pérdida de tiempo, se unió con él. En cierta ocasión en la que el dios estaba ausente en la lejana India, tuvo relaciones con un joven famoso por su belleza, Adonis. Cuado regresó Dioniso, Afrodita estaba embarazada, ya de él mismo, ya de Adonis. Entonces Hera, por odio hacia Dioniso y Afrodita, que eran hijos bastardos de su marido, hizo que diera a luz un hijo de gran fealdad, Príapo. Se trata del impúdico dios de la fertilidad que, cuando creció, se incorporó al séquito de Dioniso.
Como todos los dioses, Afrodita utilizaba su poder unas veces para bien y otras para mal. Así, a todos cuantos la despreciaban los castigaban severamente. A Eos, la diosa del alba, que en cierta ocasión se acostó con Ares, la condenó a buscar continuamente nuevos amantes. Y de Tindáreo, rey de Esparta, que no la honraba como debía, se vengó haciendo que sus hijas, Helena y Clitemestra, tuvieran una pésima reputación por su infidelidad a sus esposos. Sin embargo, a Selemno, un bello joven que estaba enamorado de la ninfa Argira, pero que había sido abandonado por la misma, le liberó de sus tormentos transformándolo en río. En cualquier caso, incluso como río, continuó amando a Argira, razón por la cual la diosa le otorgó el olvido y, desde entonces, todos los que se bañaban en sus aguas eran curados de sus pasiones eróticas.
Uno de los juegos predilectos de Afrodita era obligar a su padre, Zeus, a descender a la tierra y a tener relaciones con mortales, cuyo resultado era que siempre se encontraba el dios frente a la cólera de Hera. Dado que el mal había sobrepasado los límites, Zeus le pagó con la misma moneda: despertó en su corazón la pasión por un mortal, el bello Anquises, de Troya. La diosa, metamorfoseada en mortal, se acostó con Anquises y, unos meses más tarde, fue madre de Eneas, uno de los mayores héroes de la guerra de Troya.
MONUMENTOS
ABADIA DE BELLAPAIS (Abadía de la Bella Paz)
En la vertiente norte de la cordillera de Pentadáctilo, colgada en una terraza natural a 259 m de altitud, a pocos kilómetros de Kyrenia, se hallan las románticas ruinas de la abadía de Bellapais, uno de los monumentos góticos más hermosos de Oriente Próximo; hoy en territorio de la República Turca del Norte de Chipre.
El nombre de “bellapais” deriva probablemente del francés “abbaye de la paix” (abadía de la paz) y su corrupción veneciana en Bella Pais.
Su origen hay que buscarlo en los tiempos de las Cruzadas, cuando el sultán de Egipto y Siria, Salah ad-Din (Saladino) conquistó Jerusalén en 1178. Entonces varios monjes agustinos huyeron de la Santa Ciudad a Chipre y decidieron fundar al norte de la isla, en un privilegiado lugar, la Abadía de Santa María de la Montaña, que pronto quedó en manos de la orden Premonstratense (seguidores de la regla agustiniana) gracias a la intercesión del arzobispo Thierry (1205–1213) -quién también ordenó la construcción de la Catedrál de Nicosia-. El hábito blanco de estos monjes hizo que el lugar fuera conocido como Abadía Blanca.
Comenzó entonces, a principios del siglo XIII, la construcción de la abadía en un puro estilo gótico francés. A mediados de siglo XII la institución se vio beneficiada por el regalo recibido en 1246 de manos del caballero Roger “el Normando”, consistente en un fragmento de la Vera Cruz, convirtiéndose la abadía en lugar de peregrinación. Las obras prosiguieron durante la segunda mitad del siglo XIII y siglo XIV, gracias al patrocinio de la dinastía Lusignan, que también utilizó la abadía como residencia de verano de sus reyes. El rey Hugo III de Lusignan (1267-1284) fue enterrado aquí, y el refectorio y los pabellones del caustro se levantaron en tiempos de Hugo IV, hacia 1359.
En el año 1373, a pesar de la fortificación del lugar con torres, puente levadizo y foso, los genoveses saquearon la abadía y la santa reliquia desapareció. Hecho que hizo declinar la importancia de la abadía.
En el siglo XVI los turcos destruyeron el complejo monástico durante la conquista de isla. Las autoridades otomanas entregaron la abadía a la iglesia ortodoxa. Surgió entonces una pequeña población a su alrededor y el conjunto monastico fue abandonado, quedando en estado ruinoso.
Durante el dominio británico, muchas esculturas y relieves en piedra fueron trasladados a Nicosia, y ya en la década de los años 60 del pasado siglo se llevó a cabo un proceso de restauración que dejó el lugar tal y como podemos contemplarlo hoy.
El conjunto monástico presenta planta restangular, con las dependencias ubicadas en torno a un claustro central. Encierra auténticos tesoros arquitectónicos: la hermosa iglesia gótica, de principios del siglo XIII, el refrectorio, con su púlpido para la lectura de las Santas Escrituras, el escudo de los Lusignan y su bóveda intacta apoyada en 14 pilares; el claustro con sus bóvedas de crucería y sus arcos ojivales, la sala capitular; las celdas de los monjes, la cocina...
CATEDRAL DE SAN NICOLAS (Mezquita del Pacha Lala Mustafá)
Bajo la dinastía Lusignan (siglos XIII y XIV) Famagusta se convirtió en una de las ciudades más ricas y famosas del mundo. Orgullosa de albergar más de 300 iglesias.
El casco histórico de la medieval ciudad de Famagusta encierra auténticas joyas de la arquitectura gótica. La más relevante de todas ellas es sin duda, la Mezquita del Pacha Lala Mustafá, en otro tiempo Catedral de Famagusta.
La esbelta iglesia de San Nicolás iniciada en 1298 y consagrada en el año 1328 fue la Catedral de Famagusta. Construida en un puro y bellísimo gótico francés (que recuerda a Reims) presenta planta de salón, con tres esbeltas naves cubiertas con bóveda de crucería, arbotantes y una impresionante fachada con gran rosetón, flanqueada por torres truncadas.
La Catedral de San Nicolás fue durante el periodo franco el lugar elegido por los monarcas de la dinastía Lusignan para ser coronados Reyes de Jerusalén (tras recibir la corona de Chipre en Nicosia). En 1371 Santa Brígida de Suecia, de camino a Tierra Santa, predicó en la Catedral de San Nicolás.
Sufrió daños a lo largo de los siglos infringidos por terremotos, y otros durante el asedio otomano de 1571.
Los turcos la convirtieron en mezquita con el nombre de Santa Sofía. Blanquearon su interior, eliminaron toda representación humana o animal en pinturas, esculturas, relieves y vidrieras, y añadieron un mimbar y un estilizado minarete en su exterior.
En 1954 adopto su denominación actual, en honor al jefe otomano que tomó la ciuydad en 1571. Hoy en día sigue empleándose como lugar de culto islámico.
TESOROS BIZANTINOS EN LOS MONTES TROODOS
Los Montes Troodos son el verdadero corazón verde de Chipre. Poderoso macizo dominado por el Monte Olimpo es el más alto de la isla con sus 1.951 metros.
Desde la antigüedad esta zona ha sido muy apreciada por sus minas de cobre y durante el periodo bizantino se construyeron numerosos monasterios e iglesias, lejos de la amenazada línea de costa; un verdadero “tesoro bizantino”, brillante testimonio del patrimonio religioso de la isla, hoy declaradas muchas de ellas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
En pocos kilómetros de la costa, hacia el interior de la isla, todo cambia: el aire, la atmósfera, el paisaje, y ante nuestros ojos aparecen frondosos bosque de coníferas, cipreses, cedros y árboles frutales; pintorescos pueblecitos en las colinas transformadas en terrazas escalonadas y magníficos monasterios bizantinos y pequeñas iglesias colgadas en la laderas u ocultas en profundos valles. Parajes de increíble belleza que invitan a “perderse”, descubriendo su arte bizantino.
Monasterio Lampadistis. En el “valle de los Cerezos”, en un típico pueblo de montaña, llamado Kalopanagiotis, construido en la ladera oeste del valle del río Setrachos, famoso por sus fuentes de agua sulfurosas se halla el bellísimo Monasterio de Agios Ioannis Lampadistis, declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO; uno de los más interesantes de Chipre. Se desconoce la fecha exacta de su fundación. El grupo de edificios que sobrevive hoy es el resultado de construcciones y renovaciones realizadas en diferentes periodos. La iglesia principal (el katholicon) dedicada a San Irakleidos, posee planta de cruz griega y estructura abovedada, es la construcción más antigua siendo fechada en el siglo XI. Está decorada con un espectacular conjunto de frescos realizados entre los siglos XIII y XV, que ilustran escenas del Antiguo y Nuevo Testamento. En el siglo XII se agregó la capilla de Agios Ioannis Lampadistis, reconstruida en 1731 tras su derrumbe. A mediados del siglo XV se levantó un nártex común al oeste de las dos iglesias decorado con pinturas del siglo XV que representan los milagros de Cristo, y en la segunda mitad de la centuria se añadió una capilla abovedada al norte, conocida como la “capilla latina”, que conserva un interesantísimo ciclo de frescos religiosos realizados hacia el año 1500 con claras influencias bizantinas y renacentistas. Siglos más tarde se añadió un techo de madera cubierto con tejas planas para proteger todo el conjunto, que desde el exterior le confiere un aspecto unitario. El monasterio pervivió hasta principios del siglo XIX.
Capilla de Metamorfosis tou Sotiros. En un profundo valle, situada al NE del pueblo de Palaichori, que cuenta con varias iglesias, se halla la pequeña Capilla de la Transfiguración del Salvador, una auténtica joya del arte bizantino. Construida a principios del siglo XVI, aunque el nártex fue añadido una centuria después y el iconostasio data de comienzos del siglo XVIII, conserva en su interior un buen conjunto de frescos probablemente realizado durante la tercera década del siglo XVI, que plasma perfectamente el final del estilo bizantino, con influencias renacentistas. Atribuidos a un mismo artista, cuyo nombre se desconoce, pero considerado uno de los mejores pintores que representan la Escuela de Chipre.
Moni Panagia tou Araka. En la comarca vinícola de Pitsilia, se halla el pueblo de Lagoutera. Es famoso por contar con la presencia de la iglesia Pamagia tou Araka (la Virgen del Guisante o del Halcón -no hay unanimidad-), obra del siglo XII, uno de los ejemplos más interesantes de arte bizantino puro en la isla. Su interior conserva algunos de los frescos más hermosos de Chipre, pintados en 1192 por León Authentou procedente de Constantinopla. Parece que fue la iglesia de un monasterio del mismo nombre, construido en la segunda mitad del siglo XII. El monasterio sobrevivió hasta comienzos del siglo XIX pero la iglesia ha llegado a nuestros días. Tiene planta de cruz griega, estructura abovedada con techo de madera cubierto con tejas. La cúpula aparece cubierta por un tejado de madera separado, algo inédito entre las iglesias de Troodos. Todo su interior fue decorado con frescos, gracias a la donación aportada en 1192 por Leon Afthentis, según consta en una inscripción de la entrada norte. Durante el siglo XVIII fue ampliada demoliéndose la pared oeste. Las pinturas son de una calidad excepcional, con un programa iconográfico que recoge las tendencias del arte bizantino del momento. La importancia de estos frescos es enorme, teniendo en cuenta que casi nada se conserva de este período en la capital del Imperio. Los frescos del ábside son de un estilo diferente a los del resto de la iglesia y se cree que fueron pintados por otro artista poco antes de 1192. La iglesia recibió nueva decoración en el siglo XVII, cuando se pintaron los santos de la pared exterior septentrional. Conserva también un pequeño iconostasio en madera de 1673.
Iglesia Agios Nicolaos tis Stegis. También Patrimonio de la Humanidad, San Nicolás del Tejado se encuentra a tres kilómetros al sudoeste de Kakopetria. Formó parte de un monasterio ya desaparecido. El edificio es abovedado y de planta de cruz griega. Su parte más antigua data del siglo XI; en el XII se añadieron la cúpula y el nártex, y en el XV fue cubierta por un el amplio tejado a dos aguas, destinado a pretegerla de la nieve. Sus importantísimas pinturas poseen una cronología que abarca desde el siglo XI al XV, lo que nos permite apreciar la evolución de la pintura religiosa ortodoxa del Medievo chipriota, desde el hieratismo primitivo influido por las pinturas de Siria o Capadocia (s. XI) hasta la mayor emotividad de la época de los últimos emperadores Paleólogos de Bizancio (siglo XIV), pasando por el primitivo realismo y mayor expresividad del tiempo de los emperadores Comnemos (s.XII).
Iglesia Archangelos Michail. El pueblo de Pedoulas, ubicado en la parte superior del valle de Marathasa, recorrido por el rio Setrakhos, es un bello centro de turismo rural famoso por sus manantiales, su agua mineral embotellada y su pequeña y preciosa iglesia Archangelos Michail, considerada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO Decorada en 1474, sus pinturas, recientemente restauradas, atribuidas a Minas, alcanzan un gran realismo. Los temas tratados pertenecen a la historia bíblica, en especial a la vida de Jesús: el Bautismo del río Jordán, el Beso de Judas y la Traición en el Huerto de Getsemaní. En el ábside, el Pantocrator, la Virgen orante, la Ascensión. En el lado norte, una imagen del arcángel patrono del lugar y otra del eclesiástico Vasilios Khamadhes, fundador de la iglesia, ofreciendo junto a su familia una miniatura del edificio al propio arcángel.
Monasterio Ortodoxo de Kykko. Dedicado a la Virgen María, este monasterio –el más rico y famoso de Chipre-, verdadero centro de peregrinación de la Iglesia Ortodoxa Chipriota, se haya rodeado de colinas, en medio de un bosque de gran belleza, en la cara oeste del macizo. Fue fundado a finales del siglo XI por el emperador bizantino Alejo I Commeno para albergar un icono de la Virgen de la Misericordia, que la tradición atribuye a San Lucas, salvado milagrosamente en numerosas ocasiones a la largo de la historia. Nada queda de su primitiva construcción pues se incendió en diversas ocasiones, sin embargo hoy es el mayor y más importante Monasterio Ortodoxo de todo Chipre. Enclavado en un maravilloso paraje de pinos en una ladera de las montañas de Troodos, el monasterio encierra varias iglesias, capillas, patios, edificios para los monjes y museos con valiosos tesoros. A lo largo de los siglos los lugareños han venerado el icono y atribuido milagros a su presencia. Los amplios territorios del Monasterio se han incrementado a lo largo de los siglos gracias a sucesivas donaciones. El lugar también tuvo una gran importancia durante las revueltas por la independencia de Chipre frente a los ingleses en los años 50 del siglo pasado. Fue uno de los centros más importantes del Movimiento de Liberación de Chipre (EOKA). De hecho incluso, el arzobispo Makarios – primer presidente del Chipre Independiente – pasó su noviciado en este gran Monasterio. El Monasterio de Kikko es tanto una institución religiosa como un símbolo nacional de los greco-chipriotas.
Iglesia de Agios Sozomenos. En el centro de la villa de Galata, una pintoresca y turística localidad del valle de Klarios, se alza la pequeña iglesia de Agios Sozomenos, construida en 1513. Es de nave única con techo de madera a dos aguas cubierto con tejas, y su interior está completamente decorado con frescos realizados por Simeón Axenti y restaurados entre 2002 y 2003, que Ilustran la vida de Jesús y de la Virgen, así como de santos, mártires, prelados o ermitaños y algunas escenas del Antiguo Testamento. Destaca también San Jorge a caballo luchando contra el dragón de alas rojas, cuya cola se entrelaza en las patas del caballo. La princesa ha atado al dragón por el cuello con una cuerda y lo arrastra hacia su palacio. El rey extiende las llaves hacia el santo victorioso, mientras es observado por la reina y unos sirvientes hacen sonar las trompetas. Bajo las imágenes aparece la siguiente inscripción “Oración de los señores y siervos Georgios Máximos, su esposa y sus hijos, amén. De la mano de Semeón Axentis”. Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Iglesia Panagia tis Podithou. Esta iglesia conocida también como Panagia Eloussa (Virgen de la Misericordia) se halla igualmente de Galata. En su momento formó parte de un monasterio desaparecido. La UNESCO también la considera Patrimonio de la Humanidad. Su planta es rectangular, rematada por un pequeño ábside semicircular. Se cubre con un amplio tejado de madera a dos aguas que casi llega hasta el suelo. Fue construida en 1502 por el noble veneciano Demetrio de Coron y su esposa Helena. Su interior está en buena parte cubierto de frescos pintados en el siglo XVI por Semeon Axenti. En el nártex aparecen los donantes ofreciendo la iglesia a la Virgen, junto a una inscripción alusiva al hecho que recoge la fecha y sus nombres.
Iglesia Panigia Forviotissa (Asinou). Ubicado en la ladera boscosa de un valle cubierto de pinosse halla la bellísima iglesia de Panagia Forviotissa o tis Asinou (la Virgen de los Prados). Está incluida en la lista de edificios religiosos de Troodos considerados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Este templo fue el Katholicon o iglesia principal del monasterio de Forbion. Tal como se indica en la inscripción situada en la entrada sur, fue construida en 1105 por un funcionario bizantino llamado Magistro Nikiforos Ischyrios, quien posteriormente se convirtió en monje con el nombre de Nikolaos. El monasterio ya existía desde 1099 y funcionó hasta finales del siglo XVIII, cuando fue abandonado. Consta de dos parte: un edificio rectangular abovedado de nave única y el nártex, añadido posterior correspondiente a la segunda mitad del siglo XII. El nártex con sus ábsides semicirculares pertenece a un tipo directamente influido por la construcción bizantina. Ya desde el siglo XII se protegía con un tejado de madera a dos aguas cubierto con tejas planas. El interior está completamente cubierto de bellísimos frescos con una variada cronología. El grupo más antiguo corresponde a la época de su construcción y habría sido realizado por un artista posiblemente de Constantinopla. El nártex fue pintado poco después de añadirse, aunque en 1332–1333 sus pinturas fueron en parte renovadas bajo influencia francas. Durante el siglo XIV, parte del ábside se derrumbó y hubo de ser reconstruido y redecorado. Algunos frescos corresponden ya al siglo XVI. Fueron restaurados entre 1965 y 1967.
NOTAS HISTORICAS
Ricardo I "Corazón de León" en Chipre
A finales del siglo XII, Ricardo “Corazón de León” viajaba hacia Tierra Santa al frente de sus cruzados. En uno de sus barcos lo hacían su hermana Juana (reina de Sicilia) y su prometida, Berenguela de Navarra, cuando debido a una tormenta la nave de estas tuvo que atracar en Limassol. Entonces, Isaac Comnemo, el déspota bizantino de la isla, se negó a socorrer a las damas impidiendo que desembarcaran. Enterado Ricardo, llegó a continuación exigiendo que Isaac contribuyera en la Cruzada y reparara la humillación a que había sometido a las ilustres viajeras. Al negarse, comenzó una breve guerra tras la que toda la isla cayo en manos del monarca inglés, quién pudo desposarse en el Castillo de Limassol.
Shakespeare y Chipre
William Shakespeare convirtió la imponente ciudadela veneciana de Famagusta en escenario de su famoso drama “Otelo”, el rey moro que al servicio de República Serenísima de Venecia, defiende Chipre del ataque turco.
Éxodo hebreo hacia Palestina
Tras la Segunda Guerra Mundial, la ciudad de Famagusta sirvió también como campo de concentración para judíos supervivientes del Holocausto que pretendían instalarse en Palestina.